Por:
Alfredo Ballesteros Alfonso (Editor)
Luego de casi sesenta años
la generación fundadora de la Revolución se despide del poder. Así anunció Raúl
Castro desde su llegada a la presidencia de la República en febrero de 2008,
quien ha insistido en que se limitará a un término de dos mandatos de cinco
años cada uno los principales cargos en el gobierno. Generaciones de cubanos
nacimos con Fidel al frente del país y luego fuimos testigos de la sucesión de
Raúl. También veremos la entrega de Raúl a un nuevo Presidente, algo que en
Cuba parece lo más anormal del mundo.
Muchos, dentro y fuera de la
isla se mostraron escépticos ante los anuncios del presidente cubano sobre su
retiro en el 2018. Quizás pensaron en una estrategia política y que al llegar
el mencionado tiempo desistiría de abandonar el cargo, otros creen que con el
retiro de Raúl se desmoronará la Revolución y otros, aunque nunca dudaron de la
palabra del también primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC), vieron muy lejana una fecha que ya toca a las puertas de
cubanas y cubanos.
En su última alocución
frente al parlamento (Diciembre de 2017) Raúl anunció que en el mes de abril de 2018
Cuba tendrá nuevo mandatario, cuando dijo…"Deseo ratificar lo ya expresado por mí en el VI y VII Congreso del
Partido acerca de la conveniencia de limitar a dos términos de cinco años el
ejercicio de los principales cargos de la nación. En consecuencia, cuando la
Asamblea Nacional del Poder Popular se constituya el 19 de abril del próximo
año habrá concluido mi segundo y último mandato al frente del Estado y el
Gobierno y Cuba tendrá un nuevo Presidente..."
Los jóvenes somos el
presente de la Patria, quienes tenemos el deber de mantener la obra. En lo
personal, sin ser un analista político, no considero que nos acerquemos con el
retiro de Raúl al fin de la Revolución. Quienes comenzaron el camino desde el
Granma, La Sierra, el Moncada… cumplieron y llegó el momento de que la
generación relevo asuma los destinos del país.
Nos separan pocos meses para
abril de 2018 y no se vislumbra en Cuba el sucesor de Raúl Castro. Comentarios
callejeros hablan de presuntos candidatos, unos con más aprobación popular que
otros. Lo cierto es que cuando la Asamblea Nacional quede constituida le
corresponderá a los nuevos diputados (sino hay cambios en la ley electoral
antes) elegir quizás, al primer Presidente de Cuba que no integre la fila de la
generación histórica de la Revolución. La juventud no es el futuro, sino el
presente y llegó la hora de demostrar actitudes y capacidades para enfrentar
los retos que se avecinan.
Este pueblo tiene cultura de
que lo dirija líderes, personas con historia y de probada moral. ¡Cuba necesita
otro líder!; Quizás no tenga la historia de la Sierra… o no haya participado en
algunas de las luchas por la liberación de la patria porque el momento
histórico es otro, pero estoy seguro de que existen, en otras trincheras de
lucha personas capaces de enfrentar la noble misión de conducir a un pueblo
fidelista y patriota, de mantener y mejorar lo logrado, de no perder lo que
tanta sangre y resistencia costó.
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